Steve Levitsky y Daniel Ziblath
Ariel, 2015
El ensayo de los politólogos de Harvard contiene dos ideas principales. En primer lugar, en general, la democracia no es destruída ya por cambios súbitos de gobierno, vía golpes de Estado o revoluciones armadas. La experiencia reciente en países como Venezuela muestra qué líderes democráticamente electos, suelen utilizar medios legales para terminar de forma paulatina con la democracia. Por ejemplo, utilizando subterfugios legales para cerrar el congreso, reemplazándolo con una asamblea de leales al régimen; o usando todos los medios posibles para nombrar jueces afines en la Corte Suprema, violando el espíritu de la separación de los poderes del Estado. Por lo tanto – y esto lleva a la segunda idea principal— los actores políticos deben actuar como guardianes de la democracia, porque la ley por sí sola no va a lograr detener a un líder autoritario y voluntarioso.
El mensaje de los autores apunta a la necesidad de que partidos de distintas ideologías se pongan de acuerdo para bloquear a líderes autoritarios, aunque eso implique enemistarse con sectores políticamente afines. Por ejemplo, dicen los autores, el “establishment” del partido Republicano debió ser capaz de coordinarse para bloquear a Trump, asumiendo los costos políticos de irse en contra de un líder crecientemente popular.
Pensando en Chile… ¿serían capaces la centro-derecha, la ex-Nueva Mayoría y el Frente Amplio dejar sus diferencias de lado y ponerse de acuerdo para bloquear a un lÍder extremista, de izquierda o de derecha? Libro fundamental para entender los problemas que atraviesa la democracia liberal en el mundo y las limitaciones de las instituciones políticas para defender el mejor sistema político creado hasta la fecha.
